Las brechas de relaciones internacionales han disminuido notablemente gracias a las nuevas tecnologías, es increíblemente fácil y eficaz mandar información desde dos extremos de la tierra, hoy todavía sorprende lo mucho que ha beneficiado a la economía y sobre todo al manejo de contenido los avances conseguidos en el sector TIC, pero como todo, siempre se presentan nuevos obstáculos o necesidades, tal es el caso de la traducción financiera.
La traducción financiera no es más que un servicio creado para mejorar la toma de decisiones de empresas que manejan datos a nivel internacional, específicamente en el ámbito financiero, económico, mercantil, legal y comercial.
¿Por qué nace?
Bien podemos comenzar con una frase que todo empresario utiliza, “si se vende y se utiliza es porque es necesario para la sociedad y sea lo que sea tiene un valor en el mercado”, pues la información en la actualidad tiene un valor incondicional para acertar en inversiones, modificaciones de ventas, comparación de servicios, internacionalización de empresas, contratos y sociedades, sin embargo, en muchas oportunidades el idioma representa un freno a cualquier negociación.
Al darse cuenta las empresas que perdían demasiado tiempo interpretando esos datos que se obtienen de forma oportuna y relevante, decidieron delegar a traductores especialistas la tarea de coordinar y gestionar la entrada y salida de información para lograr una comunicación estable, y llevar los mensajes de forma eficiente, ahorrando tiempo y obteniendo incontables beneficios de dicha participación de terceros.
Caso imaginario de la traducción financiera
Supongamos por un momento que una empresa dedicada a la imprenta online barata decide internacionalizar sus servicios teniendo su sede principal en España y queriendo atacar un país vecino como Portugal, los primeros pasos lo llevan a asesorarse económica y legalmente, para determinar los riesgos, el nicho de mercado y el alcance que puede tener en algún sector en particular.
Durante esa investigación llega a la conclusión de que necesita asociarse con un inversionista de la localidad en Lisboa por ejemplo, pero no tiene a nadie capacitado para traducir contenido financiero de la empresa o persona interesada en invertir en el negocio o inclusive mostrar al inversionista la de ellos mismos, en ese momento antes de pasar a análisis desesperados, es donde se hace oportuno un servicio de traducción recibiendo los balances financieros, informes de auditoría, recomendaciones de terceros y toda la información relevante en español pudiendo tomar decisiones sin demoras y bajo la confianza de haber tenido todos los factores en cuenta.
No obstante, el servicio no termina allí, en el momento que empieza la internacionalización, se debe manejar el contenido de la sucursal en portugués. Afortunadamente, hay empresas expertas en traducción financiera y también se encargan de llevar el contenido web, de las noticias y datos del mercado local, mensajes de marketing y publicidad y textos científicos de economía, contabilidad o administrativos.