En el instante en que una persona recibe el diagnóstico de esclerosis múltiple tipos su vida cambia para siempre, esto es inevitable y, por ahora, está fuera de nuestro alcance evitar las limitaciones que dicha enfermedad trae consigo.
No obstante, hay algo que sí depende enteramente de nosotros y esto es, la actitud que mantengamos frente a ella, porque podemos mostrarnos derrotados ante el diagnóstico y caer en depresión, o bien, disponernos a intentar ser felices a pesar de ello.
Dicha toma de decisiones, no es un proceso exclusivo del paciente, debido a que la noticia también afecta a sus seres queridos, especialmente a aquellos que conviven con él, dadas las modificaciones que deben realizar en su tiempo, hogar y estilo de vida.
En este sentido, el acompañamiento de los miembros de la familia, no solo es fundamental para que la persona evite caer en depresión, adicionalmente, se requiere de su cooperación en la adaptación del entorno doméstico a fin de que sea seguro, cómodo y garantice al paciente el fácil acceso a todas las áreas. Algunas de las medidas que se recomiendan tomar con esta finalidad son:
- Disponer de un dormitorio amplio, en el que pueda vestirse y desplazarse sin inconvenientes.
- Adaptar los armarios, fregaderos, mesas y demás áreas de la cocina a una altura que le sea accesible. La misma recomendación es aplicable al baño.
- Instalar puertas anchas.
- Asegurar que el paciente mantenga una posición adecuada durante las comidas.
- Con relación a la vestimenta, es aconsejable que la persona use prendas cómodas y frescas, de ser posible, dos tallas más grandes.
- Usar prendas con cierres de velcro en lugar de botones.
De igual forma, es importante saber que las personas que sufren de esclerosis múltiple, tienden a fatigarse con frecuencia y aunque existen algunos fármacos que ayudan a mejorar esta condición, lo mejor es respetar los espacios de reposo y procurar que el entorno se mantenga fresco y cómodo.
En todo caso, la viabilidad estas medidas deben ser consultadas con el médico tratante antes de llevarlas a cabo, toda vez que será este quien en definitiva, determine la idoneidad de los recursos que intentemos utilizar para aliviar los padecimientos de nuestro familiar.